El arte rupestre del arco Mediterráneo (1998)

Unesco


Estos lugares de arte rupestre del fin de la prehistoria, en el arco mediterráneo de la península Ibérica, constituyen un conjunto de una categoría excepcional que describe el modo de vida, en una fase crítica del desarrollo humano, de manera viva y gráfica en unas pinturas únicas por su estilo y su temática. El conjunto de las pinturas rupestres del fin de la prehistoria situadas en el arco mediterráneo de la España oriental es el grupo más grande de lugares de arte rupestre que se pueden encontrar en toda Europa, y que ofrecen un retrato excepcional de la vida del hombre en un periodo esencial de la evolución cultural humana.

Un total de 16 yacimientos arqueológicos leridanos han sido reconocidos por la UNESCO como depositarios de pinturas rupestres de gran valor, tanto porque se trata de una de las primeras manifestaciones artísticas del hombre dentro de la primitiva civilización mediterránea como porque son el embrión de posteriores manifestaciones plásticas. La distinción ha sido otorgada a vestigios de Ponent como la Roca de los Moros de El Cogul, una de las piezas mejor conservadas de la pintura rupestre, y ejemplificadora del arte que se desarrolló durante el paleolítico en este territorio. También se han incluido la Cueva de Cogulló, en Vilanova de Meià; la de los Vilasos, en Os de Balaguer, y las del valle de la Coma y la Cueva de los Puntos, las dos en L'Albi. Como elementos de características singulares se contemplan también la Roca del Rumbau de Peramola o los abrigos de La Granja d'Escarp, encontrados como consecuencia de prospecciones mineras. A estos yacimientos se añaden el abrigo del valle de Ingla, en Bellver de Cerdanya; las Rocas Guàrdies, en les Borges Blanques; las Aparets, en Alòs de Balaguer; la cueva de Antona, en Artesa de Segre; Cueva del Pantano y la Cueva del Tabaco, en Camarasa; Cueva de las Ovejas, en Tremp, y las pinturas rupestres de Alfés. Todos estos yacimientos son el primer patrimonio cultural de rango mundial que han conseguido las comarcas de Lleida.

 

Información facilitada por el:

Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya
 

 

La Cueva del Macià - Cogulló

Información de contacto:

 

 

La Cueva del Macià - Cogulló

Ajuntament Vilanova de Meià - Carrer de l''Església, 1
25735, Vilanova de Meià
Web: http://www.ccnoguera.cat/vilanovademeia/
Email: ajuntament@vilanovameia.cat
973 41 50 05

 

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  • Unesco

     

    Una de las manifestaciones artísticas más conocidas de los pastores de la Edad del Bronce son las pinturas rupestres. Se localizan en las paredes de las cuevas poco profundas y son la continuación de una larga tradición neolítica con pinturas naturalistas que paulatinamente pasan a ser más esquemáticas y abstractas. En el famoso abrigo de El Cogul se da toda esta evolución pictórica. Cerca de La Coma de Meià, entre Baldomar y Alòs de Balaguer, se han localizado pinturas de estas características de cierta calidad. En el municipio de Artesa de Segre existen pequeños restos de estas pinturas, pero dado el gran número de cuevas y grutas que hay, es posible que se encontrasen más después de una cuidadosa búsqueda. La pintura rupestre esquemática que de momento conocemos se encuentra también en Cogulló, en el lugar conocido como la Cueva del Macià, situado exactamente bajo la cima más prominente. Fue localizada por los arqueólogos del IEI (Instituto de Estudios Ilerdenses) J. R. González y J. I. Rodríguez y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, según dictamen (2.23.1998), con otras 865 pinturas rupestres españolas, de las que 43 están en Tarragona y 16, en Lleida: Alfés, l'Albi (valle de La Coma y gruta de los Puntos), Les Borges Blanques (Rocas Guàrdies), El Cogul (Roca de los Moros), La Granja d'Escarp (barranco de Sant Jaume y mina Federica), Peramola (Roca de los Moros), Tremp (gruta de las Ovejas), Alòs de Balaguer (las Aparets), Artesa de Segre (Antona), Camarasa (gruta del Pantano y cueva del Tabaco) y Os de Balaguer (cueva de los Vilars). La gruta es de grandes dimensiones, unos 12 metros de anchura por unos 8 metros de altura y unos 7 u 8 metros de profundidad. La entrada está orientada al sudeste. La parte posterior del suelo es llinasca*, con una inclinación de unos 45º; hay dos agujeros en la piedra que servían para sostener unos estafermos del período en que había sido utilizada como vivienda. La pare delantera es de tierra y pueden verse las piedras del desplome de un trozo de la visera de la cueva. La gruta está cerrada por delante por un muro de piedra seca, ya que en épocas recientes fue utilizada como corral para guardar ganado.   

     

    Los restos conservados de pintura son:
     
     a) Una figura que consta de una raya vertical de 85 mm de longitud y 12 mm de anchura de la que salen por la izquierda cuatro rayas más cortas y ligeramente inclinadas de unos 30 mm. El color de la pintura es de un rojo vinoso oscuro y está realizada con la técnica de tinas planas. La parte superior no está completa, pues la piedra calcárea de la cueva se desconcha y cae con facilidad. Por este motivo sólo queda este fragmento de pintura, ya que el resto se ha perdido. La figura se puede clasificar como un pectiforme colocado verticalmente, es decir, una esquematización de un cuadrúpedo. La pintura está situada a 130 cm del suelo y a unos 145 cm de la boca derecha de la cueva. 

    b) Bajo esta figura quedan tres pequeñas manchas del mismo color, la mayor de las cuales mide 15 mm.  

    c) Al fondo de la gruta, a mano izquierda, queda otro fragmento de pintura del mismo color, una línea horizontal de unos 66 mm de longitud. Ha sido rascado con un objeto duro y también lo ha dañado el desconchado de la roca. Las pinturas esquemáticas que hemos descrito sitúan cronológicamente esta estación dentro de la Edad del Bronce, posiblemente contemporánea de la cultura de los entierros megalíticos cercanos. De todos modos, una prospección arqueológica de la cueva permitiría fecharla con exactitud y conocer algo más sobre ella.  

    Fuente: El municipio de Vilanova de Meià. Autores: Ramon Bernaus Santacreu y Ferran Sánchez y Agustí.